Avispa

Avispa  Insecto del orden de los Himenópteros, que comprende varias familias. Sus formas son poco más o menos esbeltas y tienen un estrechamiento entre el tórax y el abdomen. Casi todas poseen aguijones y sus picaduras son muy dolorosas. Unas especies viven solitarias y otras forman colonias y todas (aproximadamente 15,000) tienen una amplia distribución mundial, y están localizadas en cuatro superfamilias que tienen su origen en la superfamilia Scolioidea.

Los Sphecoidea contienen pocos ejemplos de conducta social. Por ejemplo la familia Sphecidae con diversos exponentes en Yucatán, prácticamente engloba géneros de hábitos solitarios. Algunos géneros son conocidos en México con el sobrenombre de avispas albañil por su definida conducta para la construcción de nidos de barro en los cuales depositan hasta 12 pequeñas arañas a las cuales aguijonean y mantienen en estado de anestesia para luego depositar un huevo (sobre los arácnidos dormidos) que se alimentará de éstos, luego que eclosiona en larva. En Yucatán las avispas albañil reciben el nombre en lengua maya de jolón que también es extensivo a otras familias de avispas con conducta similar. Existen dos especies bastante comunes (probablemente del género Sceliphron) ampliamente distribuidas en la región tropical de México. Una de ellas es de color negro metálico con destellos verdosos y la otra, amarilla, listada de negro. En ambas se puede observar la construcción de cartuchos de barro (cada uno para una larva con sus respectivas arañas), que adosan a los techos, paredes o vanos de las puertas en las casas de las comunidades campesinas, ranchos o haciendas. Las avispas acuden a los lodazales para acopiar barro que les sirve de materia prima para la construcción de sus nidos. Estos insectos forman en los sitios ya señalados, paquetes de 10 y hasta 20 cartuchos de barro cada uno con su respectiva larva de avispa en desarrollo y su reserva proteica viva. Otra familia de los Sphecoidea es la Bembicida. Avispas también de hábitos solitarios, corpulentos con diseños negros peculiares sobre un fondo amarillo limón, como el género Bembix sp. el cual se puede observar en los arenales de nuestra costa construyendo sus túneles de largas galerías en la arena misma, adonde llevan moscas y tábanos anestesiados que luego servirán de alimento a sus larvas. En Yucatán son muy abundantes y es todo un espectáculo verlas cavar sus túneles.

Avispas halcón. Pompilidae. Estas avispas esbeltas, de alas eternamente vibrantes se les ve en una constante inspección del suelo entre la maleza, con rápidos movimientos y alertadas pulsaciones de sus antenas en busca de víctimas. Los individuos presentan, de acuerdo al género al que pertenecen, diversos tamaños y colores; tienen ejemplares realmente gigantescos como algunas especies del género Pepsis que se enfrentan a enormes arañas peludas del grupo Migale llamadas popularmente en forma errónea tarántulas. El chaparral costero de Yucatán es rico en este género de avispas; dos especies de gran tamaño son muy comunes, una de ellas (la menor) sin dejar de ser corpulenta (5 cm de largo) es posiblemente Pepsis rubra, de color negro metálico con destellos azules y alas de un vivo naranja, comparte su nicho otra, que alcanza hasta 8 cm de largo y tiene el mismo color pero con las alas totalmente negras. Estos insectos buscan con fervorosa insistencia a la migala característica de Yucatán, denominada comúnmente en maya chiwó: araña negra y enorme, de vello irsuto, tiene el abdomen cubierto de un pelo totalmente rojo y es la víctima eterna de estos grandes Himenópteros que tras una lucha espectacular consiguen aguijonearla y luego la introducen a un hueco en el suelo preparado para contener el voluminoso cuerpo paralizado. Hecho esto, la avispa deposita un huevo sobre el abdomen de la migala, del que eclosionará una larva que, enseguida empezará a alimentarse de los tejidos de la araña.

Familia Eumenidae. Muchos géneros de estas avispas solitarias viven en Yucatán. Es muy frecuente verlas penetrando en huecos hechos en el bajareque de las chozas campesinas llevando entre sus patas orugas de mariposas paralizadas por el veneno de su aguijón. Tales avispas presentan un alargado pedúnculo abdominal y su aspecto esbelto es inconfundible, son grandes depredadoras de orugas, mariposas y de otro tipo de larvas como las de algunos coleópteros a las que paralizan aguijoneándolas cuando las sorprenden realizando su metamorfosis en la madera para luego transportarlas a su nido donde ovopositará luego sobre ellas. Todas las avispas señaladas arriba son de conducta solitaria, y en general la mayoría son conocidas como ya se ha señalado con la denominación de jolón.

También existen en Yucatán avispas mediana o fuertemente sociales, las cuales pertenecen en su totalidad a la familia Vespidae. Estas construyen nidos de material vegetal que procesan ellas mismas triturándolo entre sus mandíbulas y añadiendo secreciones salivales propias, hasta convertirlo en auténtico «papel». Los géneros de esta familia presentes en el trópico mexicano están contenidos en la subfamilia Polibinae y en Yucatán existen varios exponentes. Cabe señalar la importancia relativa que tienen estos insectos como fuente adicional de proteínas y calorías (en este último caso sólo con las avispas que producen miel) en la dieta de por sí exigua de las comunidades campesinas mayas de Yucatán, ya que los nidos de los diversos géneros son buscados con mucho interés, para ser consumidas las larvas asadas y masticados los trozos del panal de miel clara y aromática.

Polybia. Es el género más común. Construye nidos de cartón con aspecto piriforme. Los panales contenidos en tal estructura son horizontales con celdas de tipo hexagonal dispuestas en la cara inferior del panal viendo hacia abajo. Son también de cartón como la capa exterior que los recubre como una funda. Cría en dichas celdas a sus larvas, aunque ocupa algunas celdas (y en ocasiones panales completos) para almacenar miel.

Este género tiene dos exponentes bien conocidos en Yucatán, uno denominado xux o kankab xux y otro tselem.

Xux. Polybia sp. es una avispa negra de 5 mm (más o menos) de longitud, de cuerpo muy esbelto, con cinco delgadas listas amarillas en el borde inferior de los primeros cinco segmentos abdominales. Los nidos pueden llegar a tener 25-30 cm de largo por 12 de ancho, aunque lo usual es 15 cm de largo. Este insecto fija su avispero bajo las cornisas y los aleros de las casas, entre el follaje tupido de los árboles, en sitios protegidos de los muros de viejas viviendas y también en las oquedades de las paredes de los pozos. De carácter bastante tranquilo, solamente aguijonea cuando algo o alguien perturba su colonia. Las poblaciones son medianamente grandes (1,500 a 2,000 individuos). La entrada al nido está situada casi abajo de éste en forma de ranura horizontal de 2 cm de longitud.

Tselem. Polybia sp. Ligeramente mayor que la anterior (7 mm) de largo tiene dos delgadas listas amarillas en los dos primeros segmentos abdominales. Fuera de eso y del tamaño levemente mayor, es similar en todo al xux. Los nidos son mucho mayores que los del señalado arriba (45 cm de largo por 18 cm de ancho). Esta avispa busca el interior de las cavernas y paredes de los cenotes con bóveda, para nidificar, donde establece sus largos avisperos piriformes adosados al techo de dichas cavidades. Los nidos resultan muy débiles ya que el material vegetal usado para su construcción es muy quebradizo, al tacto se rompen fácilmente e inclusive se desprenden de su pedúnculo desplomándose íntegros al suelo, quizá por eso esta avispa escoge los sitios más abrigados y estables para nidificar. Las poblaciones son mayores que las del xux; quizá de 3,000 a 5,000 individuos. El ingreso al nido es similar al del xux.

Ek. Brachrygastra mellífica sp. Avispa negra o café obscuro con bandas amarillas más anchas que los de las avispas anteriores, de cuerpo más grueso y menos esbelto que Polybia, con una longitud de 8 a 9 mm. Sus nidos son casi esféricos y llegan a ser enormes, de 85 cm de largo por 50 cm de diámetro o más. A estos grandes avisperos puede vérseles pendientes de las altas ramas del laurel de la India (Ficus sp.) o de ramones viejos (Brosimun alicastrum) y otros árboles, así como tampoco es raro encontrarlos en los planteles de henequén adosados a la cara inferior de las largas y rígidas hojas del Agave Furcroides (sisal). Sus nidos son ávidamente buscados por los campesinos de Yucatán, pues sus larvas y miel son consideradas como un verdadero manjar. De las colmenas más grandes se obtiene de 1 a 2 kg de larvas y hasta 5 kg de miel. La disposición de los panales es similar a los de Polybia. La población puede llegar al exorbitante número de 15,000. La entrada de ingreso al nido es similar al de Polybia pero de hasta 8 cm de largo.

Box xux. Avispas también de la subfamilia Polibinae pero sin información sobre el género específico, totalmente negras, excepto la punta de las alas que es de un blanco puro y de 9 mm de longitud. Sus nidos tienen forma de trompo con el extremo agudo dirigido hacia abajo, donde se encuentra el orificio de ingreso al nido con un diámetro de 1.5 cm. Sitúan sus avisperos casi exclusivamente en las ramas espinosas del subín (Acacia cornigera). La apariencia de la colmena normalmente es como si estuviera deshabitada. Sin embargo, un leve movimiento del arbusto (por haber alguien tropezado con él) y las avispas salen y negrean el exterior de su morada procediendo a aguijonear con ferocidad a quien esté cerca, o dentro de su radio de acción de defensa del nido. El piquete es sumamente doloroso y produce una molesta hinchazón que no cede pronto. La población es de 500 a 700 avispas.

Boboté. Synoeca septentrionalis. Avispa de las que hacen nidos protegidos (como Polybia y Brachigastra) además de desenvolver grandes poblaciones (hasta 5,000 individuos). De todos los géneros de avispas anteriormente descritos con carácter fuertemente social, esta es la avispa mayor; tiene una envergadura de 2 cm y el cuerpo tiene color bastante oscuro siendo el tórax de un tono azul metálico con el abdomen de color castaño subido, también con algunos destellos azules. Los nidos de cartón se ven siempre adosados verticalmente al tronco de ciertos árboles, como son: chacaj (Bursera simaruba), Palo Jobo (spondias sp.), koochlé (cecropia obtusifolia), de altura considerable del suelo. La superficie externa del nido presenta zurcos como estrías transversales que le dan la apariencia de un caparazón de armadillo, debajo de la cobertura estriada encontramos celdas hexagonales donde estos insectos mantienen a sus larvas. Los nidos alcanzan dimensiones de 30 a 40 cm de largo por 15 o 20 de ancho. Si por algún motivo se trastorna la actividad normal del avispero con golpes cercanos a él o alguna otra intromisión, se puede oír de improviso un ruido peculiar similar al sonajeo de la víbora de cascabel (probablemente un batir de alas dentro de la colmena que se dimensiona en el espacio ondulado del techo interior) y de inmediato las avispas coléricas empiezan a salir y a arrojarse sobre el intruso aguijoneándole con furia. La entrada al nido es una abertura situada en la parte superior del caparazón de cartón.

Su presencia se localiza en los montes del sur y el oriente de Yucatán y muy escasamente en el norte y centro del estado. Hasta ahora hemos señalado a un grupo de avispas altamente sociales, pero en la subfamilia Polibinae también existe un grupo de géneros de comportamiento social intermedio o sea menos evolucionados que los anteriores. Estas abejas sociales, pero más primitivas, construyen panales también de papel, pero las celdas no están protegidas por un techo de cartón (como en Polybia, Brachygastra y las otras avispas señaladas). Los panales están desnudos con las celdas expuestas mirando hacia abajo en un arreglo circular o ubicadas en un panal vertical alargado y en una sola cara de éste. Dentro de estas avispas tenemos al género Polistes con nidos poblados por pocos individuos entre 8 y 40, son avispas de gran tamaño y no se encuentra miel en sus celdas, a pesar de que son grandes visitadoras de las flores. En México existen varias especies presentes, y en el caso de Yucatán contamos cuando menos con dos bien diferenciadas por el color y el tamaño, así como por la construcción específica de sus nidos.

Ni-chak o xanab-chak. Polistes hunteri. Avispa de porte grande (1.7 cm) de longitud de color rojo ladrillo, el tórax con diseños amarillos y abdomen con delgadas fajas amarillas en los cuatro primeros segmentos abdominales. Construye nidos verticales de cartón que tienen en una cara celdas hexagonales para criar a sus larvas y sobre ellos se ve una población pequeña de obreras y reinas, atendiendo a la cría. La cercanía de cualquier persona paraliza a las avispas en una actitud estática de alarma y si prosigue el acercamiento al nido, las avispas vuelan para aguijonear enseguida.

Avispa denominada kanpet kin, en lengua maya. Polistes mayor. Avispa muy grande, bastante mayor que la anterior, de color amarillo con diseños y listas delgados de color rojizo con 2.2 cm de longitud; los nidos son circulares con las celdas mirando hacia abajo y normalmente el número de individuos que laboran en él no llegan a ser más de 10. Tampoco producen miel y las celdas como el caso anterior son utilizadas para mantener a la cría, también son avispas de mal carácter y sus aguijonazos son sumamente dolorosos pudiendo producir fuertes trastornos alérgicos. Estas dos especies de Polistes fijan sus nidos de los techos y cornisas de las viviendas lo mismo que de las bóvedas de cavernas y viejos edificios.

En general todas las avispas señaladas son de gran utilidad para la agricultura ya que son grandes depredadoras de larvas de diversos insectos dañinos para los cultivos y hortalizas y áreas frutícolas en general. Algunas construyen sus panales con materia vegetal y por eso se les ha llamado las inventoras del papel, ya que de hecho es cartón confeccionado con la celulosa de la madera que mordisquean.