Árbol del huevo

Árbol del huevo  (Familia Sapindaceae. Blighia sapida Koenig & Sims) Otros nombres: aki, seso vegetal. Originario del Brasil y aclimatado en Yucatán. Narciso Souza Novelo, lo describió así: «Tiene un bello follaje verdeclaro y ramas erguidas que pueden alcanzar mayores dimensiones que las de nuestros laureles. Hojas perennes, opuestas, peninervadas, lustrosas y de forma ligeramente aovada; las flores, ligeramente coloreadas en crema, son muy pequeñas y están dispuestas en racimos, pero solamente una o dos de ellas siguen su desarrollo después de la fecundación y, por lo general, son las que están insertadas en la extremidad libre de los pedúnculos florales, de modo que al crecer los frutos estos quedan sostenidos por un pedúnculo bastante largo, como observamos en nuestros mangos. Las florecillas, regulares, son hermafroditas, pentámeras y tienen un receptáculo cóncavo; el cáliz de cinco sépalos caducos; la corola está formada por cinco pétalos imbricados; el androceo está constituido por ocho o diez estambres, dispuestos en dos verticilos, con filamentos muy cortos e insertados por su base en un anillo glanduloso; las antenas son biloculares. El ovario, coronado por un estambre tripartido, es tricarpelar, trilocular, con un óvulo en cada lóculo, dispuesto en placentación axilar; los tabiques interloculares son persistentes.

El fruto es una hermosa cápsula de paredes gruesas, con un vivo color escarlata, que puede oscurecerse hasta dar el guinda, y este color lo tiene mientras no llegue a su madurez, pues cuando llega a esta fase de su desarrollo el fruto va tomando un color amarillo, que se extiende gradualmente del ápice a la base; el fruto es dehiscente y se abre en tres valvas que arrastran consigo el tabique interlocular correspondiente, y al replegarse hacia el pedúnculo, dejan ver tres semillas negras, parecidas a las del caimito, pero mucho más pequeñas, envueltas casi por completo en un perispermo tan desarrollado y carnoso que se parece a la almendra de una castaña grande. Las paredes de las valvas están tapizadas interiormente con tupidas vellosidades sedosas, de color asalmonado, viniendo a constituir verdaderos estuches de terciopelo.

Propiedades: Las hojas y la corteza son astringentes y se les puede usar como febrífugos, sudoríferos y otros usos, ya sea en infusión, ya en forma de polvo. La madera es muy blanca y se le puede llamar marfil vegetal, empleándola para la construcción de muebles. La parte más interesante, y la que da más importancia y valor al árbol, es esa parte carnosa que envuelve cada semilla, o sea el perispermo. Este contiene fécula, gluten, principios azucarados, almidón y otros productos hidrocarbonados. Además, esta carnosidad perispérmica, después de preparada, adquiere el gusto de la yema de huevo de gallina. Por tal razón, puede dársele diversos usos gastronómicos.

Produce frutos todo el año. Los primeros ejemplares que llegaron a Yucatán los importó de Belice Felipe Ibarra y de Regil».