Sisal

Sisal  Según refiere el Códice de Calkiní, Sisal estaba situado en la antigua provincia de Ah Canul. Puerto precolonial el cual toma su nombre de una hierba llamada zizal xin, en maya, o se refiere a un lugar fresco ya que ziz en maya significa frío o fresco.

Sisal tiene una larga tradición comercial desde tiempos prehispánicos, cuando los mayas en pequeñas embarcaciones transportaban sus mercancías bordeando la Península. Ya iniciada la colonización española, en 1562, el alcalde mayor de Yucatán, Diego de Quijada, mandó construir el primer camino carretero de Mérida a Sisal para contar con una salida al mar adecuada para las embarcaciones más cercana que la de Campeche. Durante el siglo XVIII vivió el acoso de los piratas. Fue hasta el gobierno del capitán general Benito Pérez Valdelomar (1800-1811), cuando se autorizó la construcción de un muelle y fue habilitado como puerto menor, con lo cual adquirió importancia como vía de comunicación e intercambio mercantil y le valió el título y categoría de villa en 1840. Por real orden, en 1807 se dispuso que durante la guerra entre España y Francia, «pudiesen desembarcar en Sisal los buques de La Habana que prefiriesen ese puerto al de Campeche» y fomentar la navegación a la provincia de Yucatán para beneficio de su industria y agricultura. Por este lugar salieron al mercado internacional las primeras arrobas de henequén, conocido desde entonces como sisal. En 1844 surgió la idea de trasladar la aduana marítima que se localizaba en este puerto a un punto en la costa denominado El Progreso, por ser éste más cercano a Mérida y para evitar cruzar la ciénaga de las inmediaciones de Sisal, la cual dificultaba su acceso. En 1871, por decreto presidencial, Progreso quedó abierto como puerto de altura y cabotaje y albergó la aduana marítima. Así, el puerto de Sisal quedó reducido a un modesto refugio de veraneantes hasta la actualidad.

El poblado de Sisal vio pasar a la emperatriz Carlota cuando se dirigió a la ciudad de Mérida en 1865 y como testimonio están las pequeñas columnas de mampostería erigidas entre esta localidad y Hunucmá, en las cuales se grabó en relieve el número de legua. En 1847 se instaló la primera línea telegráfica entre Mérida y Sisal. Otro hecho relevante fue la aprehensión de Antonio López de Santa Anna, por órdenes del general Manuel Cepeda Peraza, cuando se dirigía a La Habana. Entre sus edificios relevantes cuenta con un faro de 9.80 m de alto conocido como el Castillo de Sisal, construido en 1850 y colocado sobre un hermoso torreón. En 1905 se hizo una reconstrucción general de éste para que sirviera como alojamiento de los guardafaros. De su muelle, levantado en 1811, sólo quedan vestigios, y la casona conocida como El Monifato, construida en el siglo XVI, aún conserva una inscripción labrada sobre piedra «Es del Señor Juan de Orduña y de su mujer Doña Gerónima Ortiz y de sus herederos 1585». En la plaza principal del poblado se encuentra la iglesia que reemplazó al antiguo templo destruido por un incendio en 1847, y entre los edificios públicos están el mercado, construido en 1859, el cuartel, la aduana marítima, el cementerio y el rastro. Actualmente, esta localidad cuenta con una infraestructura y vías de comunicación que permiten el fácil acceso a los visitantes. Entre estas vías se encuentra la carretera Hunucmá-Sisal, construida en 1959 durante la administración del entonces gobernador Agustín Franco Aguilar.