Servicio Yucateco de Información

Servicio Yucateco de Información  (1952) Publicación de análisis socio-político que se presentaba al lector en forma epistolar numerada. Las diversas cartas comprendieron temas de actualidad para el lector local, puntualizaron en aquellos vinculados a la política nacional e internacional. En la carta primera se expusieron, de esta manera, los objetivos que se perseguían y la situación en la que surgió este Servicio Yucateco de Información «Cada semana, sin falta, recibirá carta nuestra y con ella el verídico relato del análisis imparcial de muchos acontecimientos locales de los que es muy probable que no tenga usted, por otros conductos, la debida información. Privados como estamos los yucatecos (…) del servicio de una prensa diaria que, en sus columnas, dispense franca acogida a las diversas corrientes representativas de la opinión pública, nos queda el único recurso de promover, entre los ciudadanos, un directo intercambio de ideas, de comentarios de noticias que suplan, en cierto modo y aunque con naturales limitaciones, las diferencias de los órganos periodísticos». (Servicio Yucateco de Información, Carta 1, 14 de junio de 1952). La crítica que su redactor elabora contra los dos periódicos que, por aquellas épocas, se publicaban en Yucatán es contundente y agresiva. Sus redactores fueron Leopoldo Peniche Vallado y Humberto Lara y Lara.

El epígrafe con que dieron inicio las cartas fue la siguiente declaración de Adolfo Ruiz Cortines «Los regímenes revolucionarios consolidan una vez más las libertades públicas que son raíz de nuestra mexicanidad la libertada de creencia, la de pensamiento y la de escribir, la crítica al gobierno la agrupación y todas las demás que dignifican al hombre y al ciudadano y que consagra nuestra carta magna. De tales libertades jamás prescindiremos». Todas las cartas estuvieron firmadas por Julio Osorio Romero y la publicación llegó a conformar una segunda época, cuya última carta en existencia en la Hemeroteca José María Pino Suárez es la 4, fechado el 7 de junio de 1958. Se imprimió en los Talleres Gráficos Zamná.