Aznar y Aznar, Tomás (1736-1804) Fundador de la familia Aznar en Yucatán. Militar español. Nacido en la aldea de Bubal, Jaca, provincia de Huesca, en la zona pirenaica del norte de Aragón. Ocupada La Habana por fuerzas inglesas, en 1762, la Península de Yucatán, debido a su gran cercanía con Cuba adquirió singular importancia estratégica, por lo cual, a partir de entonces, la Corona española reforzó considerablemente sus guarniciones, enviando a jefes y oficiales ya con cierta veteranía. Por tal razón, Aznar y Aznar vino destinado a Mérida por Real Orden de Carlos III, fechada el 19 de septiembre de 1779. Era teniente del Real Cuerpo de Artillería y al llegar a Campeche un año después, el 15 de septiembre de 1780, fue ascendido a capitán y se le asignó una paga de 65 pesos mensuales. Tenía 44 años y se mantenía soltero. Al año siguiente inició diligencias en la Corte para que se le autorizara a contraer matrimonio con Tecla Antonia Peón y Cárdenas, joven criolla yucateca, hija del coronel del batallón de milicias de voluntarios blancos Alonso Manuel Peón y Valdés, asturiano, y de Leonor de Cárdenas y Díaz, andaluza de origen. Reunida la documentación correspondiente y cumplidos los requisitos que debían satisfacer los militares españoles si querían formar familia en América, el rey concedió el permiso solicitado, según Real Cédula del 3 de febrero de 1782, y tan pronto ésta llegó a Mérida se celebró la boda en la capilla de la hacienda Uayalceh, una de las más ricas del coronel Peón. Del matrimonio nacieron ocho hijos: cuatro varones y cuatro mujeres. En 1797 Aznar y Aznar, ya con grado de coronel, fue llamado a prestar servicio fuera de Yucatán, donde permaneció su familia. Por sus conocimientos y experiencia como artillero fue incorporado a las fuerzas que defendían Puerto Rico, amenazado por Inglaterra a consecuencia del tratado de alianza firmado en 1796 entre España y Francia. En la isla hizo amistad con Benito Pérez Valdelomar, quien algún tiempo después, en octubre de 1800, tomó posesión como gobernador y capitán general de Yucatán y llegó a ser, posteriormente, su consuegro. Desde su elevado puesto, Pérez Valdelomar protegió a la familia Aznar que venía enfrentando graves dificultades económicas a partir de que el coronel fue trasladado a Puerto Rico, donde falleció en 1804 sin nunca haber podido retornar a Yucatán. Pocos años después, sus restos fueron traídos a Mérida y descansan en la capilla del Santo Cristo de las Ampollas.