Aljibes

Aljibes  Con el fin de proveerse de agua para el consumo, existía la práctica común, ahora ya casi en desuso, de recolectar las aguas de lluvia sobre las azoteas de las viviendas. Estos almacenamientos domésticos podían o pueden ser, de dos tipos: superficiales, conocidos como tanques de agua de lluvia, o subterráneos, a los que se denomina aljibes y de los cuales el agua se extraía generalmente por medio de una bomba manual. Algunos aljibes de gran capacidad tenían finalidades comerciales. El líquido suministrado a domicilio por los tradicionales aguadores era de ese origen. En los relatos de sus viajes a Yucatán, John L. Stephens ya describe la existencia de aljibes en algunos ranchos carentes de cenotes o pozos naturales.