Alcalde mayor Llamábase así el juez de letras que ejercía la jurisdicción ordinaria en algún pueblo o partido, y también al funcionario que había en las ciudades para servir de asesor al corregidor cuando éste no era togado. Las instrucciones de Carlos I, del año 1543, reglamentaron la función de los alcaldes mayores, quienes, a más de ejercer la jurisdicción ordinaria en su territorio, decidían las causas civiles y criminales, y les correspondía practicar cierta inspección en materia económica y política. Cuando en ciudades de cierta importancia actuaban como auxiliares del corregidor, los alcaldes mayores solían ser dos: uno para la jurisdicción civil y otro para la criminal. Para poder acceder al puesto de alcalde mayor era necesario ser abogado. Durante la dominación española y especialmente en los reinos de la Nueva España, se denominaba alcalde mayor a quien gobernaba por el rey algún pueblo que no era capital de provincia, aunque no fuese juez de letras. Las alcaldías mayores eran demarcaciones territoriales, generalmente una ciudad y su distrito, en que se subdividían los virreinatos, capitanías generales y gobernaciones. En la América española los alcaldes mayores tuvieron también el carácter de jueces. Eran por lo general nombrados por el rey, pero los virreyes y presidentes de las Audiencias podían proveer interinamente los cargos. En Yucatán, durante un tiempo, a partir del juicio de residencia al Adelantado Montejo, gobernaron la Península diferentes alcaldes mayores, designados unas veces por la Real Audiencia de los Confines (Guatemala) y otras por la de México. El primero de estos fue Gaspar Juárez de Ávila (1550-1552). Más adelante llegó a Yucatán Diego de Quijada, primer alcalde mayor nombrado directamente por el rey, quien gobernó de 1562 a 1565, trayendo la facultad de encomendar indios y tasar los tributos conforme a las nuevas leyes. A partir de 1565, inmediatamente después de Quijada, son los gobernadores los que comienzan a regir los destinos de Yucatán, siendo el primero que gobernó con tal título Luis de Céspedes y Oviedo, quien permaneció en el poder de 1565 a 1571.