Albergue San Vicente de Paúl Esta institución nació en 1963 cuando sor Beatriz Laviada Arrigunaga gestionó y obtuvo la donación de un antiguo pabellón dentro del Hospital O’Horán, con objeto de alojar transitoriamente a personas foráneas de escasos recursos económicos, ya sean familiares de enfermos ingresados en el Hospital o de enfermos que reciben tratamiento en forma externa. Con la ayuda de otras religiosas Hijas de la Caridad de San Vicente de Paúl, que ahí mismo residían, acondicionaron modestamente el local para albergar un promedio de 20 personas.
En 1972, un patronato donó un terreno sobre la avenida Jacinto Canek frente al nuevo edificio del Hospital, siendo el 28 de enero de 1990 cuando el arzobispo de Yucatán, Manuel Castro Ruiz puso la primera piedra de lo que sería el primer módulo del nuevo local de la institución, iniciándose inmediatamente la construcción. Para estas fechas, el albergue ya manejaba una población de 50 a 60 personas, siendo totalmente insuficiente el antiguo local a pesar de las adaptaciones efectuadas por sor Beatriz. A principios de 1992 se habían terminado tres piezas con capacidad para 33 personas. Las atenciones son proporcionadas por cinco religiosas y seis colaboradoras que voluntariamente asisten sin horario fijo. Los recursos para el sostenimiento se obtienen de donaciones, bazares, rifas, ventas y colectas.