Crónica de Calkiní Cuaderno manuscrito en lengua maya con letras latinas. Refiere hechos históricos ocurridos en ese pueblo y alrededores, como el asentamiento humano en este lugar después de la destrucción de Mayapán en 1441 y la conversión en capital del cacicazgo llamado Ah Canul; las incursiones de Montejo y de la resistencia que se le hizo; asimismo de la captura final de la población y de las actividades que desarrolló Montejo para pacificar la región en 1541, antes de proseguir su marcha hasta T’ho, donde fundó Mérida. En 1867, Faustino Castro obtuvo el manuscrito del cacique de este pueblo y se lo obsequió a Juan Francisco Molina Solís quien, a su vez, se lo donó al obispo Crescencio Carrillo y Ancona, quien lo agregó al Chilam Balam de Chumayel.