Cabada, Juan de la

Cabada, Juan de la  (1903-1986) Narrador, maestro y guionista cinematográfico nacido en Campeche, Campeche, y muerto en la Ciudad de México. Vivió largas temporadas en Yucatán. Realizó sus primeros estudios en el colegio católico del Sagrado Corazón en su tierra natal y la preparatoria en Mérida, en otra institución católica. Todavía adolescente, marchó a Cuba, donde trabajó y estudió hasta 1920. En 1927 aparecieron sus primeras colaboraciones en la revista campechana Sol de Provincia: su primer artículo, «El día de Colón», y su primer cuento, El alfiler, basado en una anécdota de la vida real. En 1929 escribió Más que negocio, De sesión a sesión y Oro judío, para los periódicos, El Libertador, Espartaco y El Machete, órgano del Partido Comunista Mexicano. De esa misma época es Hecho en México, incluido después en alguno de sus libros. En 1929, en la Ciudad de México, se involucró ya en su incansable labor militante dentro de diversas organizaciones como la Cámara del Trabajo, la Confederación Sindical Unitaria de México y la Liga Antiimperialista de las Américas, actividad que le trajo, en consecuencia, repetidas estancias en la cárcel. En 1931 publicó el cuento Las ratas, en el periódico Llamada, órgano de la Liga Intelectual Proletaria, de la que fue fundador junto con Leopoldo Méndez, David Alfaro Siqueiros, Pablo O’Higgins, Consuelo Uranga y Chano Urueta, entre otros. Un año después aparecieron sus cuentos Plomo, Diez minutos, El baño, El reloj, La ocupación, El pórtico de don Blas y El lavatorio de la virgen. En 1933, junto con otros intelectuales y artistas, fundó la LEAR (Liga Mexicana de Escritores y Artistas Revolucionarios), de la que fue presidente en 1935. Colaboró también en la revista Frente a Frente, de la LEAR. Como delegado de esa organización participó, en 1935, en el Primer Congreso de Escritores Americanos, celebrado en Nueva York. A su regreso publicó en la revista Todo los cuentos La niña y A bordo. En 1936 viajó a Campeche, Yucatán y Quintana Roo, donde encontró el material que se convertiría más tarde en uno de sus mejores libros: Incidentes melódicos del mundo irracional. En 1937-1938 realizó un largo viaje por Europa. Asistió en Madrid al Congreso de Escritores y Artistas, en el que participaron también Silvestre Revueltas, José Chávez Morado, Fernando Gamboa, Octavio Paz, Elena Garro, José Mancisidor y Carlos Pellicer, entre otros intelectuales mexicanos. Colaboró en periódicos antifascistas de España y Francia. En 1937 en la revista valenciana Hora de España insertó su cuento Taurino López. En 1938, en el semanario Voix de Madrid, editado en París, publicó los cuentos Tres signos del Zodíaco y El mañico. Retornó a México en 1939 y colaboró en el diario El Popular y en la revista Futuro. Su primer libro, Paseo de mentiras apareció en 1940 e incluyó una selección de cuentos inspirados en tierras campechanas.De 1940 a 1943 viajó por las selvas de Campeche y Quintana Roo, con intervalos de reposo en Yucatán, desde donde colaboró con publicaciones nacionales como Cuadernos de América, Tierra Nueva y México en la Cultura. Residió en Nueva York a fines de los años cuarenta, donde ejerció labores literarias y periodísticas. De 1951 a 1963 recorrió de nuevo el territorio de nuestro país e intervino como argumentista o adaptador en diversas películas mexicanas, entre ellas: Subida al cielo, Maratón de baile, Raíces, María, la Voz; La ilusión viaja en tranvía, La tijera de oro, Canasta de cuentos mexicanos, Sonatas, Simitrio, Las señoritas Vivanco y El brazo fuerte. También participó en Calzontzin inspector, con los personajes de «Rius», Las fuerzas vivas y La llovizna. Se desempeñó como profesor en la Universidad Autónoma de Guerrero. En 1979 fue postulado por el Partido Comunista Mexicano como candidato a la gubernatura de Campeche. En 1980 publicó el libro Un secreto en el paisaje; en 1981, cuatro más: La tierra en cuatro tiempos, Pasados por agua, El duende y María, la Voz. También escribió una pieza teatral, La Guaranducha (1970). Su obra, de la que hay versiones en inglés, francés, ruso, polaco y alemán, fue publicada íntegra por la Universidad Autónoma de Sinaloa.