Calamar  Molusco cefalópodo. Se han identificado en los alrededores de la Península 12 especies. Una de ellas habita sólo en aguas del Caribe y las otras se encuentran también en el Golfo de México. La especie exclusiva del Caribe es el llamado calamar ovalado, Sepioteuthis sepiodea, de unos 20 cm de longitud. Las del Golfo y el Caribe son Loligo palei o calamar de aletas largas, de unos 20 cm y hábitos costeros. Lolliguncula brevis o calamar de dedal corto, de sólo unos 8 cm, es el menor de los calamares mexicanos. Ancistroteuthis lichtensteini, de 20 cm. Pholidoteuthis adami alcanza 30 cm de talla y es, al parecer, la especie más abundante en la costa atlántica de México; forma enormes cardúmenes y ofrece un importante potencial comercial. Illex illecebrosus o calamar de aletas cortas es de talla comparable al anterior y a menudo se le usa como carnada. I. coindetti o calamar volador, de unos 25 cm, que al parecer habita aguas profundas hasta 400 m. Omastrephes pteropus, de hasta 38 cm, ha sido capturado a más de 3 000 m. Las siguientes existen tanto en el Pacífico como en el Golfo y el Caribe: Onychoteuthis banksii, que tiene una amplia distribución mundial. Histioteuthis dofleini, de sólo 9.5 cm, con cabeza muy grande y el ojo izquierdo mayor que el derecho. Omastrephes bartrami o calamar morado, que es de considerable talla —hasta 45 cm—, abundante y con carne de buena calidad. Tysanoteuthis rhombus o calamar volador, así llamado porque da grandes saltos fuera del agua, alcanza 80 cm y es el mayor de los calamares mexicanos. La pesquería de calamar en la Península está limitada a Yucatán y Campeche y es básicamente de tipo artesanal. Se realiza con pequeñas embarcaciones ribereñas, mediante el procedimiento de atraer a los animales con luz y atraparlos con ayuda de poteras o robadores, que son cilindros ahusados con anzuelos sin lengüeta y se manipulan con cordeles.