Caballero y Góngora, Antonio

Caballero y Góngora, Antonio  (1725-1796) Obispo de Yucatán. Nació en la villa de Priego, España. Se educó en la Real y Pontificia Universidad de Granada, donde obtuvo el doctorado en sagrados cánones y teología. Fue catedrático de filosofía y teología en el Colegio de Santa Catalina. A los 49 años fue electo para ocupar la mitra de Chiapas, pero debido a la muerte de fray Juan Manuel de Vargas y Rivera, designado para ocupar la Diócesis de Yucatán, fue promovido a ésta por iniciativa del pontífice Pío VI y por nombramiento del rey Carlos III de España. El Papa despachó las bulas en septiembre de 1775.

El historiador Carrillo y Ancona señala en su obra El Obispado de Yucatán que el prelado arribó a Campeche el 21 de julio de 1776 y tomó posesión de su catedral el 27 del mismo mes. Instalado en la silla episcopal, reorganizó el Colegio de San Pedro, que tras la expulsión de los jesuitas enfrentaba serios problemas, para que sirviera de auxiliar al Seminario de San Ildefonso. Suprimió el gravamen aplicado a los curas para proveer al palacio episcopal cuando se anunciaba la llegada de un nuevo obispo, así como las contribuciones especiales para las fiestas de Pascua y el onomástico del prelado. Practicó ampliamente la visita pastoral y en el breve tiempo de su pontificado, dejó seis tonsurados y 42 presbíteros, once de los cuales eran del clero regular y 31 del secular. En abril de 1778, cuando aún no cumplía dos años de gestión, en la ciudad de Campeche recibió una cédula real por la cual fue promovido al Arzobispado de Santa Fe de Bogotá. La vacante de la Diócesis de Yucatán no se declaró sino hasta el 9 de octubre de 1779, después de que el Cabildo recibió la comunicación de Caballero y Góngora, en donde participaba su toma de posesión canónica de la Metropolitana de Santa Fe. En su traslado llevó consigo a doce jóvenes yucatecos que bajo su protección se educaron y terminaron sus estudios universitarios. Entre los más destacados están Pedro Bolio Torrecilla, quien ocupó el cargo de intendente de las provincias de Yucatán y Tabasco y con tal carácter firmó el Acta de la Junta General en que Yucatán proclamó su independencia de España el 15 de septiembre de 1821, así como su interés por incorporarse a la nueva nación mexicana; José Domingo Duarte, quien llegó a ser gobernador de Caracas, e Ignacio Cabero, presidente de la Corte Nacional de Cartagena. Como arzobispo de Santa Fe tuvo un desempeño notable durante más de 12 años y su labor le fue reconocida por el rey, con la imposición de la Gran Cruz de la Orden de Carlos III y con la designación como virrey, capitán general y presidente de la Real Audiencia del Nuevo Reino de Granada, hoy Colombia, cargo del que tomó posesión el 15 de junio de 1782. Falleció a los 71 años de edad, cuando el rey de España lo había presentado a la Santa Sede para Capelo Cardenalicio.