Congresos feministas El primero fue convocado por el gobernador, general Salvador Alvarado, por decreto del 28 de octubre de 1915. El reglamento se promulgó en diciembre y el Congreso se realizó del 13 al 16 de enero de 1916. Fue presidido por Consuelo Zavala C., el vicepresidente resultó Domingo Canto Pastrana y la tesorera Adolfina V. de Ávila. En su mayoría asistieron profesores de las escuelas primarias urbanas; la población rural e indígena prácticamente estuvo ausente. Se presentaron muchas ponencias sobre cuatro temas y entre las conclusiones destacaron la modificación de la legislación vigente para otorgar a la mujer más derechos y libertad; la creación de escuelas y cátedras de artes y oficios y la apertura de puertas a la mujer en todos los campos de acción social. El Segundo Congreso fue también convocado por el general Alvarado. Se realizó del 23 de noviembre al 2 de diciembre de 1916. Concurrieron 50 delegados por el partido de Mérida y 150 por los foráneos. Las conclusiones se refirieron a la necesidad del certificado médico prenupcial, a la educación de los hijos en caso de divorcio y al voto que estaría limitado a las mujeres mayores de 21 años que supieran leer y escribir, pero estipulándose que las mujeres aún no estaban preparadas para ocupar cargos de elección. El Tercer Congreso se efectuó el 5 y 6 de abril de 1957 y fue presidido por Fidelia Sánchez de Mendiburu. Asistieron 100 delegadas efectivas y otras 100 honorarias y fraternas. Se presentaron 34 ponencias, principalmente sobre temas educativos, mejoramiento del nivel social y la posición de la mujer ante las responsabilidades de la sociedad.