Cigüeña Ave de la familia de los cicónidos. De las 17 especies registradas a nivel mundial, sólo tres existen en América y de ellas dos en México; ambas se encuentran en los humedales de la península yucateca. La más conocida y abundante es la cigüeña americana (Mycteria americana) que recibe los nombres comunes de acocolote, cayetán, gaitán y cigüeñón. Con las alas abiertas abarca 1.60 m y el cuerpo llega a medir más de un metro de largo, con un gran pico masivo, negro y ligeramente curvado hacia abajo. Los adultos tienen el plumaje enteramente blanco, salvo las puntas de las alas que son negras, con el cuello y la cabeza desnudos y negros. Es un ave gregaria que busca la compañía de otros individuos de su especie y forma bandadas que vuelan a gran altura y recorren los pantanos en busca de alimento. La segunda especie es el jabirú o tuyuyú (Jabiru mycteria), la mayor ave del Continente Americano y, entre todas las aves mexicanas de humedales, la más escasa y la más gravemente amenazada con desaparecer del territorio nacional. Según los censos aéreos quedan en el país sólo un puñado de parejas reproductoras, unas en la zona de la Laguna de Términos de Campeche y otras en la Reserva de Sian Ka’an en Quintana Roo, que es el límite norte de su área de anidación. Esta ave descomunal de tres metros de envergadura y que puesta de pie casi iguala la estatura de un hombre normal, tiene el plumaje inmaculadamente blanco y la cabeza y las patas negras, con un enorme pico negro, robusto, puntiagudo y ligeramente curvado hacia arriba y una ancha banda de color rojo escarlata que los adultos presentan en el cuello. Habita los zacatales y su dieta consiste esencialmente en animales terrestres como reptiles y pequeños mamíferos, complementada con insectos y diversos invertebrados. Es generalmente de hábitos solitarios, no forma grupos en su búsqueda de alimento y rehuye la presencia humana.