Chicxulub (Cráter) Importantes estudios científicos indican que en el pueblo costero de Chicxulub, Yucatán, se impactó hace 65 millones de años un cuerpo proveniente del espacio, de grandes dimensiones, dando como resultado la formación de un enorme cráter, de aproximadamente 300 km de diámetro. Según algunas teorías en proceso de comprobación, el choque y consecuente formación del cráter ocasionó la extinción de los dinosaurios y la muerte del 70 por ciento de las especies marinas. De acuerdo con los cálculos del grupo interdisciplinario de científicos que están al frente de la investigación, en el choque se liberó una energía similar a la que podría desprenderse con la detonación de 10 bombas atómicas por kilómetro cuadrado o 500 mil veces el temblor que sacudió a la Ciudad de México en 1985. Se detectó el cráter porque en las cercanías de Chicxulub se encontraron estratos de iridio, el elemento químico más pesado que registra la tabla periódica y material que se presenta en altas cantidades en cuerpos extraterrestres. Los estudios formales sobre la estructura del cráter, que abarca una parte de la Península de Yucatán y otra del mar, se iniciaron en 1991 y están a cargo de un grupo de científicos del Instituto de Geofísica de la UNAM y del Lunar and Planetary Institute de la NASA. Entre marzo y julio de 1994, Multiservicios de Exploración, bajo la supervisión de la UNAM, perforó cinco pozos para obtener muestras de rocas calizas, las cuales permitieron comprobar que el cráter es producto del choque de un cuerpo extraterrestre (probablemente un asteroide o un cometa) y no el resultado de un fenómeno terráqueo.