Casa de Ejercicios A comienzos del siglo XX y durante la Cuaresma, se iniciaron los ejercicios anuales de retiro para hombres, organizados por las conferencias de San Vicente de Paúl. Para darles mayor impulso, el arzobispo Tristchler y Córdova proyectó y creó una casa en la Quinta San Pedro, donde se había instalado el Seminario Menor y luego también el Mayor. La nueva Casa de Ejercicios fue bendecida con gran solemnidad el 24 de marzo de 1912 por el arzobispo. Tenía 35 habitaciones, con puertas al corredor, amplia capilla, cocina, comedor, baños y una habitación especial para el prelado, servicio de agua y un espacioso patio interior.