Manzanero Canché, Armando  (n. 1935) Compositor e intérprete musical. Nació en Mérida, Yucatán. Su padre, Santiago Manzanero, fue un conocido trovador en el ambiente musical de la entidad, integrante del Conjunto Yucatán junto con Víctor Madera, Pedro Hoil Calderón y Mario Souza. También incursionó en la composición musical y Flor de azahar constituyó una de sus canciones más conocidas. Su madre, Juana Canché Baqueiro, destacó como bailadora de jarana y fue muy popular en el estado por su participación en las vaquerías. Armando Manzanero comenzó a estudiar música a los ocho años en la Escuela de Bellas Artes de Mérida y sus primeros maestros fueron Amílcar Cetina, Emma Rubio, Adda Mendoza y William «El Chino» Sabido. A los 12 años eligió como instrumento musical el piano y a los 15 fundó un conjunto musical integrado por adolescentes. Tres años más tarde se inició profesionalmente.

En Mérida, trabajó como pianista en el club nocturno Tulipanes, en el Teatro Regional Héctor Herrera y en la Orquesta de Adriano Madariaga. A los 20 años se trasladó a la Ciudad de México para seguir estudiando con diferentes maestros, como Rafael de Paz y José Sabre Marroquín y para probar suerte en el medio artístico. Aprovechó sus frecuentes giras por Estados Unidos de América, como acompañante de diversos cantantes, para tomar cursos rápidos y especializarse. En la capital del país, al inicio de su estancia, laboró en los bares Candilejas y El Pollito y, más adelante, acompañó al piano a figuras consagradas del espectáculo, como Pedro Vargas, Lucho Gatica, Olga Guillot y Daniel Riolobos, entre otros. Su primer disco lo grabó en 1959, sin que tuviera ninguna repercusión. A principios de los 60 dio a conocer sus composiciones Voy a apagar la luz y Paso a pasito, que constituyeron un éxito, sobre todo esta última en la voz de Angélica María. Su triunfo definitivo llegó en 1967 cuando, tras el éxito de su canción No, en la voz de Carlos Lico, le siguió Adoro, que fue la canción del año y alcanzó el primer lugar de popularidad. Casi simultáneamente se difundieron Esta tarde vi llover, Contigo aprendí, Tengo y otras más, suscitándose el fenómeno de que de las 10 canciones más populares del momento, ocho eran de Manzanero. El escritor Salvador Novo, entonces cronista de la Ciudad de México, a fines de 1968, habló del «fenómeno Manzanero» y destacó que desde Agustín Lara no había surgido en el país un compositor de tanto impacto, conjuntándose la música y letra de sus canciones. A partir de ese momento, se fue consolidando como el más importante de los compositores mexicanos contemporáneos y uno de los más populares de Latinoamérica. Incluso su música se difundió en España, Estados Unidos de América, Canadá, Japón y diversos países europeos y asiáticos. Algunas de sus canciones se han traducido a 30 idiomas diferentes y han sido interpretadas por cantantes internacionales, como Frank Sinatra, Andy Williams, Sammy Davis y Vicky Carr. Somos novios tiene el récord de haber sido grabada en más de 700 versiones. Es el compositor mexicano de música popular más internacional y que ha viajado por todo el mundo para cumplir compromisos artísticos. En tiempos recientes, tomó un curso en Brasil de música computarizada y nuevos acordes musicales, porque suele decir que no tiene miedo a ser viejo, pero sí a ser antiguo. En la actualidad, Manzanero ha producido dos discos exitosos para el cantante Luis Miguel y ha actuado a dúo con la peruana Tania Libertad, en un espectáculo de gran calidad. Continúa con sus giras internacionales y nacionales y sigue componiendo e interpretando nuevas melodías, como Nada personal. Por su popularidad, trayectoria y obra musical ha recibido diversos reconocimientos, entre ellos, la Medalla Yucatán 1986, otorgada por el gobierno estatal. Sin duda es el autor de música popular más importante de México, Latinoamérica y el mundo hispano-parlante.