Moch Couoj (S. XVI) Fue cacique de Champotón en 1517, cuando llegó a ese lugar la expedición española comandada por Francisco Hernández de Córdoba, con tres navíos; llevaba como piloto mayor a Antón de Alaminos, una fuerza de 120 soldados; entre ellos, Bernal Díaz del Castillo. Como estaban necesitados de agua, desembarcaron en la orilla con sus toneles, encontraron un pozo cerca del poblado y los llenaron, pero no se atrevieron a embarcar de nuevo, pues Moch Couoj, al frente de sus guerreros, los estaba vigilando. Transcurrió la noche y a la mañana siguiente, los guerreros mayas los atacaron con tal denuedo que les ocasionaron 57 bajas. Los españoles abandonaron los toneles y como pudieron volvieron a sus navíos; desmantelaron el más pequeño, le prendieron fuego y se retiraron. Desde entonces ese sitio fue conocido por éstos como la Bahía de la Mala Pelea. En 1518 llegó la expedición de Juan de Grijalva al mismo sitio, pero dispusieron mejor su estrategia y pudieron vencer a las fuerzas de Moch Couoj y ocupar el poblado. En 1519, la expedición de Hernán Cortés pasó frente a Potonchan, pero por consejo de su piloto, el mismo Antón de Alaminos, no intentó desembarcar. Algún tiempo después debió de haber fallecido Moch Couoj, pues no se le volvió a mencionar y ya en 1535 fue otro el cacique que autorizó el desembarco en Champotón de la misión franciscana. En 1966, siendo presidente municipal de Champotón el arqueólogo Raúl Pavón Abreu, construyó un parque con un monumento dedicado a Moch Couoj.