Mejorada, templo y ex convento de La  El templo de La Mejorada fue construido en 1640, según data una placa que se encuentra en la portería por donde se entraba al claustro del convento anexo y fue designado a la advocación de Nuestra Señora del Tránsito. Este templo se llama así por su semejanza con el templo de La Mejorada en Madrid, construido por María de Aragón. En 1621, el encomendero Diego Montalvo de García comenzó a fabricar de su peculio una iglesia o ermita para que fuera monasterio de recoletos.

Esta obra sin concluir, la donó en 1624 a los franciscanos, y la recibió como su provincial, fray Gerónimo Porras y Montalvo. Dirigió las obras de edificación del templo desde sus cimientos, fray Pedro Navarro. Se terminó en 1640. Según López de Cogolludo «el coro y media naranja de la capilla mayor están pintados al fresco de iluminación, obra del mismo maestro que la del convento grande de San Francisco. El retablo del altar mayor es escultura de orden dórica, llenando todo el testero de la capilla mayor. Los ornamentos de la sacristía y adornos de los altares, de lo más rico y mejor que hay en la tierra». El autor de las pinturas que decoraban el templo no se cita, pero sí quien dirigió la obra: Fernando de Nava. En la primera capilla del lado izquierdo de la entrada existió en su tiempo una cruz de piedra con la imagen de Cristo, anteriormente colocada en el patio del antiguo convento de San Francisco que, según López de Cogolludo y Luis Rodríguez Correa fue de las que al entrar los españoles en Yucatán encontraron en Cozumel. Para 1648 el convento tenía sus celdas, un refectorio, dormitorio para novicios, locutorio, sala de confesiones, biblioteca y una cripta que estaba en el subsuelo de una de las piezas de la sacristía. La portada principal es de estilo plateresco sencillo. Sus únicas dos campanas de bronce datan de 1723 y se encuentran en el primer cuerpo de la espadaña de la izquierda.

El convento anexo al templo se construyó entre 1688 y 1694, y fue destinado para albergar a los franciscanos que querían observar su reglas disciplinarias con extrema rigidez y severidad. Fueron sus fundadores: fray Pedro Navarro, fray Juan de Acevedo, fray Juan de Orbita, fray Juan García, fray Bartolomé de Fuensalida y el lego fray Juan Fernández. Posteriormente, les fue donada la plaza situada al sur del templo, donde construyeron un hospital para los enfermos, y los religiosos lo ocuparon hasta que el gobernador de la Colonia lo destinó para alojamiento de sus tropas denominándolo Cuartel de Dragones. El decreto expedido en Madrid en 1820, que suprimía las órdenes religiosas mendicantes, llegó a Mérida en 1821 cuando tomaba posesión el último gobernador y capitán general de la Colonia, el mariscal de campo, Juan María Echeverri y Manrique de Lara. El convento de La Mejorada fue el único que se conservó y fue electo canónicamente prelado guardián, Manuel Martínez Castellanos, el más joven de toda aquella comunidad. Por decreto del gobierno de Yucatán del 25 de junio de 1861, se estableció el Hospital General, en el ex convento de La Mejorada, habiendo pasado antes el edificio al dominio del estado por resolución suprema del 22 de enero de 1861. En 1907, este edificio fue destinado a la Escuela Correccional de Artes y Oficios, para lo cual hicieron algunas adaptaciones consistentes especialmente en la formación de salones para talleres, vaciando muros y sosteniendo los techos con puentes de viguetas de fierro y pilares de mampostería. Otros techos fueron reforzados, pero se conservaron las antiguas vigas de madera. Durante el gobierno del general Alvarado, y por decreto del 15 de diciembre de 1915, fue segregada al convento una franja de terreno sobre la calle 50. En este terreno construyeron las escuelas primarias para niños y niñas. Posteriormente el ex convento estuvo destinado por el gobierno federal para habitación de las familias de los soldados de la guarnición que se encontraban en el Cuartel de Dragones.

El convento está compuesto de dos cuerpos: uno al Este, junto a la iglesia, y otro al Norte, entre dos grandes patios, de los cuales el primero tiene frente sobre la calle. El cuerpo del éste es casi regular, formando un cuadrilátero alargado de Oriente a Poniente. Consta de dos pisos con un pequeño patio al Sur, que mira a la calle y uno muy hermoso al centro rodeado de corredores o antiguos claustros del convento. En la esquina suroeste, y en el primer piso, hay un salón con pesados contrafuertes por fuera, que tapa parte de la fachada de la iglesia. Esta pieza fue la entrada principal del convento y es donde estaba la portería. Además de ella, hay por el Poniente nueve más, divididas del resto del edificio por el corredor que se prolonga hasta comunicarse con el primero de los grandes patios. Entre este patio y el corredor del Norte, hay un salón que sirvió de taller a la escuela que estuvo en ese lugar y después del corredor oriente, una crujía doble con dos piezas; la escalera principal y dos piezas cabeceras que abarcan la doble crujía, siendo la del sur un ancho pasillo que da acceso a la escalera, y la del norte una de las modificadas para el taller. Actualmente ocupa estas instalaciones la Facultad de Arquitectura.

El templo de La Mejorada es de mampostería de una sola nave en forma de cruz latina, con cuatro capillas de cada lado. El piso de la iglesia era de losas y fue sustituido por mosaico moderno. Cuando la iglesia comunicaba al convento, una misma escalera servía para subir al coro, pero como actualmente está clausurada sólo se puede subir por medio de una escalera de madera que va a dar a un boquete abierto en el techo de la segunda capilla de la izquierda. Mucho tiempo antes, las cuatro capillas tenían rejas de madera matizadas y doradas, pero ahora sólo la primera de la derecha la tiene de madera pintada. Esta capilla es la que sirve de sacristía y conserva un pequeño altar con algunos detalles sin mayor importancia. La casa cural se encuentra al fondo de la iglesia y la construcción es de mampostería de dos pisos, con un patio al Oriente, que da a la calle 59.