Puntas

Puntas  En la Península de Yucatán, el término punta se utiliza para designar las formaciones relacionadas con la configuración de la costa. Por su morfología, es posible distinguir dos tipos diferentes de puntas los extremos del cordón litoral que delimitan las entradas del mar hacia los esteros y las salientes de tierra hacia el mar, sean arenosas o rocosas, y que marcan un cambio de dirección en el trazo de la línea litoral. La porción noroeste y norte de la costa yucateca, bañada por las aguas del Golfo de México, se caracteriza porque a todo lo largo se despliega un cordón litoral bajo y arenoso, de aproximadamente 500 km de longitud contados desde la ciudad de Campeche hasta la esquina nororiental de la Península y de 3 km en sus partes más anchas, que se encuentra separado de la tierra firme rocosa por una serie de esteros y ciénagas. Sin embargo, este cordón litoral no es continuo de tramo en tramo se interrumpe, como sucede en Real de Salinas, Chuburná, Chelem, Telchac, Dzilam, San Felipe y Holbox, permitiendo la intercomunicación permanente entre el mar y las lagunas costeras, formadas a causa de los flujos y reflujos marinos, donde se localizan puntas del primer tipo.

Las puntas aparecen a todo lo largo del cordón peninsular, pero abundan más sobre sus porciones suroeste, entre Champotón y Campeche, y oriental. En el nombre maya con que se denominan diversas puntas aparece el elemento «ni», que en esta lengua significa nariz por ejemplo, las puntas Nimum, Nitun y Nizuc. Es probable que tenga alguna relación, por asociación de formas, entre las prominencias territoriales y el apéndice humano. En la historia de la Península de Yucatán, sobre todo en el período de la Conquista y la Colonia, debido a que la navegación marítima jugó un papel determinante en el desarrollo económico y social, los nombres de las puntas y su localización se hicieron indispensables. Eran puntos de referencia en el trazo de las rutas a seguir por conquistadores, comerciantes, piratas, geógrafos y toda clase de navegantes que circulaban por sus litorales. Todavía en la actualidad, muchos de los grandes y potentes faros que auxilian a la navegación marítima están ubicados estratégicamente en aquellas puntas que sobresalen en el litoral. La punta yucateca de mayor relevancia histórica y geográfica es Cabo Catoche, sitio en el que desembarcó el capitán español Francisco Hernández de Córdova en 1517 y que marcó el descubrimiento oficial de Yucatán y de lo que sería la Nueva España. Asimismo, es el punto que determina la división continental entre el Golfo de México y el Mar de las Antillas. A lo largo del litoral peninsular se localizan unas 70 puntas.