Patinaje sobre ruedas

Patinaje sobre ruedas  Llegó a Yucatán a principios de la segunda década de este siglo y se popularizó a finales de los años veinte. Desde niños, algunos de los principales patinadores sobre ruedas de esta época fueron Luis Novelo Carbonell, César Gamboa, Miguel Ángel Vega Navarrete, Gonzalo Medina Duarte, los hermanos Humberto y Rolando Rodríguez Rojas, Carlos «Chalón» Castellanos Sauri, Alfredo Rosado, Humberto Muñoz, Luciano Alfaro y Alonso Rosado Espínola, Entre las damas se recuerda a las señoritas Margarita Guzmán Duarte, Ligia Escalante Marín y Elsie Concha Campos.

Los principales lugares donde se practicaba el patinaje sobre ruedas en Mérida, fueron los parques de San Juan, Santa Ana, el Callejón del Congreso y en la «L» de San Cristóbal. A finales de los años veinte hubo exhibiciones en el Club Mérida, situado entonces en la confluencia de las calles 57 y 58 y, posteriormente, en los parques se jugaron carreras argentinas sobre patines de ruedas y, en el Instituto Literario se practicó el basquetbol sobre patines de ruedas.

Carrera a Progreso. Se recuerda también la famosa carrera con patines sobre ruedas que se celebró el 8 de julio de 1930 de Mérida a Progreso, organizada por el Comité Impulsor del Deporte del Suburbio de Santa Ana, encabezado por los señores Lorenzo Rosado Casares, Alfredo Gómez, Carlos Moguel Ávila y Rudecindo Muñoz, y que patrocinó el Ayuntamiento de Progreso. Los participantes salieron de la avenida Colón de Mérida a las 4:55 a.m. y recorrieron los 36 kilómetros hasta el puerto por la carretera inaugurada tres años antes por el gobernador del estado, Dr. Álvaro Torre Díaz. El ganador resultó Humberto Vega, quien cubrió la distancia en 3 horas 10 minutos; en segundo lugar llegó el joven Gonzalo Medina Duarte, cinco minutos después; y en tercero, Fernando Concha Campos, 10 minutos detrás de Medina. También completó el trayecto Alfredo Rosado, mientras Humberto Muñoz recorrió 30 kilómetros, Luciano Alfaro 18 y Alonso Rosado Espínola, 19. El ganador recibió una moneda de oro de 10 pesos y los que llegaron en segundo y tercer lugares, monedas de oro de cinco pesos. Según crónica de la época, los concursantes rompieron el récord de distancia en carreras de patines hasta entonces implantado en el país, pues la mayor distancia recorrida había sido de 1 500 metros. En otras épocas la afición por los patines sobre ruedas recobró alguna popularidad en Yucatán, pero no se mantuvo. El 18 de octubre de 1998, el Instituto Juvenil del Deporte en Yucatán hizo la presentación de la primera escuela técnica deportiva de patines sobre ruedas, dividida en cuatro modalidades: patines en línea de velocidad, patinaje artístico, hockey sobre patines y roller. Una de las entrenadoras de una de las especialidades, fue la cubana radicada en Mérida, Nayleb Suárez. La escuela fue creada con el fin de formar patinadores que compitieran en la Olimpíada Infantil de Yucatán, del 21 al 31 de mayo de 1999.