Revista Yucateca (La)  (1847-1849) «Periódico político y noticioso» publicado en Mérida, Yucatán; utilizó como lema los versos: «Sedienta de saber la inteligencia abarca el universo su gran vuelo.» Bajo la dirección de Alonso Aznar Pérez, en su «Prospecto», se propuso abordar materias como: noticias extranjeras y nacionales, política exterior e interior. Descubrimientos en ciencia artes y literatura. Todo ello, para «contribuir con las débiles fuerzas que contemos a las mejoras del país en las que sí están interesados todos los buenos yucatecos, no dudamos que auxiliarán con sus luces nuestras patrióticas tareas».

Sus redactores consideraron que La Revista Yucateca sería una innovación en el periodismo peninsular, debido a que se ocuparía de varios temas y no de una sola especialidad como lo hacía el Boletín Comercial y El Registro Yucateco: «La Revista, que abrazará tanto la política como la literatura, que no sólo se reduce a comunicar noticias extranjeras y nacionales sino a comentarios cuando su importancia lo requiera, nos parece que será interesante, pues toca puntos que han dado abundante materia a publicaciones semejantes en otros pueblos que por sus progresos debemos imitar como ejemplos». («Prospecto», 1847).

Se publicó los viernes de cada semana y constaba de 24 páginas, de entre las cuales las últimas ocho estaban dedicadas a la publicación de una obra literaria. En un inicio sus redactores pensaron en la publicación de Saturnino Fichet, de Federico Soulie, pero dado que por aquella época aparecía en el Faro Industrial de La Habana, se decidió editar El negro mendigo y el banquero de cera, de Pablo Feval. En cuanto al aspecto noticioso, difundió noticias de Francia, España, Gran Bretaña, Estados Unidos, México y la Península de Yucatán. Su costo era de medio real por cuaderno y se editó en la imprenta de Rafael Pedrera, ubicada en la calle Santiago núm. 8. Las suscripciones se llevaron a cabo en Mérida, en la imprenta de su publicación, en Campeche con Gaspar Oliver, en Izamal con Felipe Alcalá, en Valladolid con Victoriano Romero y en Tekax con Manuel Ramírez Marín. El tomo 1, único en existencia en la Hemeroteca José María Pino Suárez está conformado por 344 páginas e incluye litografías.