Redfield, Robert

Redfield, Robert  (1897-1958) Nació en Chicago y murió en Clinview, Estados Unidos de América. Catedrático de antropología, decano de la División de Ciencias Sociales de la Universidad de Chicago e investigador asociado de la Carnegie Institution of Washington. Es considerado como el impulsor de la investigación de campo en México en los aspectos sociológicos y antropológicos. Inició sus investigaciones en Tepoztlán, cerca de Cuernavaca, donde realizó sus temporadas de campo en 1926 y 1927, y publicó sus resultados en 1930 en Tepoztlan, a Mexican Village. A Study of Folk Life, traducido posteriormente al español. En esta obra, definió algunos conceptos como el de cultura folk, criticado desde entonces, porque situó estas culturas al margen de la cultura universal de corte occidental, debido a las participaciones de sus tradiciones, costumbres, creencias, disposiciones espirituales, entre otras. Sus críticos le reprochan su etnocentrismo que lo hizo colocar a la cultura occidental como la meta obligada de las demás culturas.

Sin embargo, la aportación fundamental de Redfield en esta obra es precisamente la de estudiar la dinámica del cambio en una comunidad sujeta al proceso de transición de una cultura folk a la de referencia occidental. Enseguida, al utilizar las conclusiones de su primer estudio y a manera de comprobación de algunos de sus primeros resultados, emprendió un estudio de mayor extensión en la Península de Yucatán. Con la colaboración de algunos discípulos, escogió cuatro comunidades que representaron para él cuatro etapas distintas en el proceso de aculturación, éstas son Mérida y Tusik, que ofrecen los extremos de este proceso de aculturación, y Dzitás y Chan Kom, donde encuentran en la primera un grado mediano de aculturación, mientras que en la segunda existe un predominio de la tradición folk. Mérida fue estudiada por Asael T. Hansen, y un resumen fue publicado en la Enciclopedia Yucatanense, tomo VI, en 1946; Dzitás fue estudiado por el propio Redfield y su esposa Margaret Park; Chan Kom, por Redfield y Alfonso Villa Rojas y Tusik, por Villa Rojas. Sólo los resultados de los dos últimos fueron publicados: Chan Kom, a Maya Village, Redfield y Villa Rojas, Carnegie Institution, 1934 y The Maya of the East Central, Quintana Roo, Villa Rojas, Carnegie Institution, 1945. De este último se publicó un resumen en la Enciclopedia Yucatanense, tomo VI, y luego, por el Instituto Nacional Indigenista, en 1978, con el título Los elegidos de Dios, etnografía de los mayas de Quintana Roo.

Como resultado y síntesis del conjunto, Redfield publicó en 1941 The Folk Culture of Yucatan, traducido inmediatamente al español y publicado en 1941 en México, con el título Yucatán, una cultura de transición. Ahí, Redfield describe cada una de las comunidades estudiadas, a Tusik como una comunidad independiente, étnicamente distinta a los fuereños, en donde no existen clases sociales y predominan los elementos de tradición. Chan Kom es menos independiente, las diferencias raciales poco marcadas, ya que personas ajenas al grupo forman parte de la comunidad, aunque reconocen, hasta cierto grado, la prevalencia de los t’sulob. En Dzitás existen ya marcadas diferencias estatutarias fundadas en el éxito o perfeccionamiento individual, reduciéndose por consiguiente las diferencias de origen étnico. En Mérida, las diferencias étnicas son aún menos importantes como elementos estatutarios, sustituidas por diferenciaciones de clases económicas. En resumen, según Redfield, los cambios en la cultura, que en Yucatán parecen acompañar al aislamiento y a la homogeneidad decrecientes, pueden resumirse en tres grupos principales: la desorganización de la cultura, la secularización y la individualización.

Años después, en 1948, Redfield regresó a Chan Kom donde realizó una nueva temporada de trabajo y publicó en 1950 A Village that Chose Progress: Chan Kom Revised. Por sus obras, vemos los cambios ocurridos en este pueblo. Chan Kom nace del crecimiento excesivo de Ebtún. Los jóvenes emigran y fundan una colonia de Ebtún, pero están forzados a cumplir con sus obligaciones hacia sus mayores. Para librarse de ello, tienen que cambiar y tomar el camino de la modernidad. Para ello, recurren a todo el apoyo que las instituciones oficiales pueden proporcionarles. Formaron su propia Liga de Resistencia en 1926, adoptaron el sistema de ejido, entre otras iniciativas. También se convirtieron al protestantismo, no sólo símbolo de cierto progreso sino marca de la mayor ruptura con el pasado y con Ebtún. Finalmente, lograron la creación de su propio municipio. El camino parecía haber transformado definitivamente a la comunidad, sin embargo, algo ocurrió. Los mayas no estaban totalmente dispuestos a abandonar el alcohol, el tabaco y los altares familiares y menos todavía, la jarana, que les permitía expresar la alegría comunitaria, por la simple exigencia del pastor protestante y, poco a poco, volvieron a su catolicismo tradicional. Pero esto no era más que uno de los indicios de un regreso generalizado a las formas tradicionales de existencia. La preponderancia de la familia extensa volvió a imponerse a la familia nuclear, los cargos religiosos se consolidaron al lado de los cargos políticos y el Xmen volvió a recuperar su rol en las ceremonias y las prácticas curativas. Al poco tiempo no había diferencias entre Cham Kom y las demás comunidades de la región; todos, jóvenes y viejos, se consideraban mayas, un pueblo perteneciente a la selva, a la milpa y a la aldea.

Después de su último estudio en Yucatán, este fundador de la llamada Escuela de Chicago produjo todavía algunos libros como The Primitive World and its Transformations, en 1953, The Little Comunity, en 1955, y Peasants and Culture, en 1956. Redfield y sus obras dejaron un gran impacto en la sociología y la antropología mexicanas, así como discípulos de renombre como Alfonso Villa Rojas, ilustre investigador yucateco, que, además de realizar los estudios antes mencionados, desempeñó cargos de importancia en el Instituto Nacional Indigenista, la Comisión de la Cuenca de Papaloapan, el Patrimonio Indígena del Valle del Mezquital, el Instituto Indigenista Interamericano y otras instituciones académicas, como la Escuela Nacional de Antropología, donde participó en la formación de investigadores como Fernando Cámara Barbachano, yucateco, Ricardo Pozas Arciniega, Calixta Guiteras Holmes, Rosa María Lombardo, Arturo Monzón, Francisco Plancarte y otros.