Balmis, Francisco Javier (1753-1819) Médico natural de Alicante, España. Se graduó de cirujano en Valencia en 1772. Residió en la Ciudad de México de 1778 a 1791, prestando sus servicios en el Hospital del Amor de Dios, donde atendió a muchos enfermos de viruela durante la epidemia de 1779. Al volver a España en 1792, y enterado del descubrimiento de Jenner sobre la prevención de la viruela, tradujo al español la obra de Moreau titulada Tratado histórico y práctico de la vacuna. Entusiasmado por este procedimiento y aprovechando que el rey Carlos IV lo había nombrado médico de cámara, le propuso organizar una expedición para llevar a diversas regiones del mundo el virus vacunal. Aceptada la idea, se reunió a 23 niños que quedaron al cuidado de Isabel Cendala y Gómez y llevando Balmis como ayudantes a Francisco Pastor Balmis (su hermano), José Salvany y Antonio Gutiérrez, dos practicantes y cuatro enfermeros, salió la expedición del puerto de La Coruña el 20 de noviembre de 1803. Tocó primero las islas Canarias y llegó a Puerto Rico el 12 de marzo de 1804; de ahí se dirigió al puerto de La Guayra en Venezuela, donde destacó Salvany para que continuara la vacunación en la América del Sur.
La expedición llegó a La Habana el 10 de junio de 1804; a Sisal, Yucatán, el 28 de junio donde realizó la primera vacunación, tocó luego Campeche; en Ciudad del Carmen comisionó a su hermano Francisco Pastor para que se encargara de vacunar en Tabasco, Chiapas y la Capitanía General de Guatemala hasta Nicaragua. Balmis y los demás llegaron a Veracruz el 25 de julio y a México el 8 de agosto. Con otros grupos de niños, Balmis recorrió las provincias del Norte, de septiembre a diciembre de ese año. El 14 de enero de 1805 salió de México con 26 niños y el 7 de febrero el grupo partió de Acapulco embarcado en la nao, llegando a Manila, Filipinas, en abril; vacunó luego en Macao y en varios puntos de China. De allí continuó en viaje directo hasta Lisboa, a donde llegó en agosto de 1806. Balmis se presentó luego a la Corte en Madrid para informar de su misión. En 1810 consiguió que lo comisionaran para supervisar e impulsar la vacunación en la Nueva España, por lo que retornó a México en junio e inició sus actividades, que fueron temporalmente interrumpidas en septiembre de ese año por el estallido de la guerra de Independencia. A pesar de eso, siguió trabajando dos años más y después regresó a España, donde presentó un informe de su comisión el 26 de febrero de 1813. Falleció seis años después.