Día del Trabajo  Llamado propiamente Día Internacional del Trabajo, se celebra el 1 de mayo. Tuvo su génesis en la demanda de los trabajadores de los Estados Unidos de América por una jornada laboral de ocho horas desde mediados del siglo pasado, apoyada por manifestaciones y huelgas, como la del 1 de mayo de 1886. El suceso más grave ocurrió el 4 de mayo de 1886: durante un mitin de protesta en Chicago, un desconocido arrojó una bomba que mató a seis personas e hirió a 20, motivo por el cual se apresó a ocho obreros, a quienes se inculpó de motivar el atentado; cuatro de ellos fueron ahorcados el 11 de noviembre de 1887, por lo que se les conoce como los Mártires de Chicago. En junio de 1893, el gobernador de Illinois absolvió a los demás, pues comprobó que todos, inclusive los ajusticiados, habían sido víctimas de un falso juicio. La Federación Americana del Trabajo continuó la lucha y señaló el 1 de mayo de 1890 para una huelga general, lo que fue secundado por manifestaciones en varios países de América y Europa. En 1892 se efectuó en Génova una reunión de la Segunda Internacional y se aprobó la adopción del 1 de mayo como Día Internacional del Trabajo y se conmemoraría el sacrificio de los Mártires de Chicago. Ese mismo año fue la primera celebración de esa fecha en la República Mexicana, en Chihuahua. Posteriormente, en 1913, la Casa del Obrero Mundial en la Ciudad de México, organizó una huelga y manifestación ese día, en demanda de jornada diaria de ocho horas y el descanso dominical. Desde 1917 está considerado este día como de descanso obligatorio en la Ley Federal del Trabajo que reglamenta el artículo 123 constitucional.

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