Biblioteca Crescencio Carrillo y Ancona Al crearse en 1870 el Museo de Yucatán por Decreto del gobernador Manuel Cicerol, fue nombrado director Crescencio Carrillo y Ancona (más tarde, 1887, obispo) quien fundó y fomentó una biblioteca anexa al museo, especializada en libros sobre Yucatán, principalmente descripciones arqueológicas y manuscritos antiguos mayas y de los primeros tiempos de la Colonia, posiblemente rescatados de lo que fue la primera biblioteca del convento de San Francisco. En varios de sus estudios y ensayos, menciona el ilustre obispo haber consultado fuentes que se encontraban en el Museo; además, recibió algunos libros del Chilam-Balam y otros documentos enviados por los párrocos de diversos sitios. El Museo estaba instalado en un departamento de la planta baja del Instituto Literario (antiguo Colegio de San Pedro, calle 60 con 57). El obispo falleció en 1897, pero el Museo y su biblioteca siguieron funcionando en el mismo sitio hasta 1905 en que la dependencia fue trasladada al ex cuartel de San Sebastián y en 1915 fue semidestruida, almacenándose sus reliquias, objetos y libros en la iglesia de Santa Lucía, en donde al parecer desaparecieron muchas cosas curiosas, ejemplares importantes y documentos valiosísimos. Siendo gobernador del estado Felipe Carrillo Puerto en 1923, decretó la creación del Museo Arqueológico e Histórico de Yucatán, que se instaló en enero de 1924 en el viejo edificio donde había estado el primer hospital y convento de San Juan de Dios (esquina de las calles 58 con 61). Su primer director fue el poeta Luis Rosado Vega, quien instaló la colección de libros y documentos en la ex iglesia anexa, pues sumaban varios centenares. En 1937, siendo director del Museo Alfredo Barrera Vásquez, fue organizada la biblioteca por Mireya Priego de Arjona, y con el nombre de Biblioteca Crescencio Carrillo y Ancona fue abierta al público en 1938. Hubo nuevo cambio de local en 1957, pues debido a las malas condiciones del edificio del Museo se decidió demolerlo, pasando todo el acervo al Palacio Cantón; las piezas arqueológicas al sótano y la biblioteca a un salón. En 1971 se publicó su catálogo. A principios de 1979 fue trasladada al renovado edificio de la Casa de la Cultura (calle 63 entre 64 y 66) donde en la planta alta se acomodó al lado de la Biblioteca Cepeda Peraza, conservando cada una su propio catálogo, personal y acervo; de acuerdo con el informe oficial, contaba con 10,710 volúmenes y 644 documentos históricos. En enero de 1986, fue transferida al nuevo local de la Biblioteca Central Estatal Manuel Cepeda Pereza (en la calle 55 con 62) y posteriormente, al crearse en 1993 el Centro de Apoyo a la Investigación Histórica de Yucatán, fue trasladada a la calle 64 al lado de la Hemeroteca José María Pino Suárez.