Sociedad Recreativa Popular En 1891, algunos integrantes de la Sociedad Obrera Paz y Unión de Mérida, inconformes con la reelección del presidente Luis Cetina, deciden separarse y formar otra agrupación, pero siempre con los propios fines de Paz y Unión. Su primera directiva estuvo constituida por Amador S. Sosa, presidente; Pedro Gómez, vicepresidente; José María Salazar, tesorero; Manuel Basulto y Ruperto Escamilla, como vocales. También estaban Gervasio Fuentes como pro-secretario y los vocales suplentes Candelario Evia y Candelario Gómez. Debió su nombre, según sus propios socios, a un verso de un poema que el vate José Correa Villafaña improvisó en una de las primeras reuniones, al declamarles «No haya más que vacilar/ afuera preocupaciones/ sociedad de diversiones/ Recreativa Popular». La sociedad promovió diversos bailes tanto en su aniversario como en el Carnaval o por algunos acontecimientos políticos, hasta ya entrados los 40 del siglo XX.