Ordóñez de Nevárez, Alonso (¿-1595) Nació en Colunga, Asturias, y murió en Mérida, Yucatán. Este viejo servidor de la Corona llegó a la provincia en julio de 1593, acompañado por sus criados Pablo de Junco, Juan Rodríguez Vigil, Bartolomé de Acerres de Rivadesella y Cristóbal Gutiérrez Flores de Toledo. Fue nombrado gobernador de Yucatán por Felipe II para sustituir a Antonio de Vozmediano y tomó posesión el 31 de julio de ese año. En sus dos años de gobierno tuvo grandes diferencias con el Ayuntamiento de Mérida. Cuando llegó a la Península supo que Vozmediano había dispuesto que ningún español pudiera anticipar más de 12 reales a los indios por cuenta de los contratos de tejidos de algodón y otras industrias, bajo la pena de perder toda acción para recuperar el valor del anticipo. Esta medida había desagradado a los comerciantes contratistas que especulaban con los indios, dándoles algodón y dinero a cuenta de mantas, cera, miel y otras mercancías que éstos se comprometían a entregar en cierto plazo. Los especuladores creyeron que el nuevo gobernador revocaría o enmendaría la providencia, pero se equivocaron, pues Ordóñez ordenó que no se anticipara nada a los indios, bajo la pena de perder lo fiado y no poderlo reclamar judicialmente. En consecuencia, se inició una pugna en la que intervino el Ayuntamiento, muy probablemente en contra de lo mandado por el gobernador. Fray Jerónimo de León, provincial de los franciscanos, también tuvo sus diferencias con Ordóñez por haber nombrado corregidores, cargo que se había abolido por decreto real desde la administración de Guillén de las Casas. Los gobernadores Francisco de Solís y Antonio de Vozmediano habían tratado de restablecer el cargo, sin éxito. Ordóñez nombró sus corregidores y de inmediato los indígenas empezaron a resentir los mismos perjuicios por los que tal empleo se había abolido. El provincial, a través de su apoderado en México, Pedro de Espinosa, denunció ante la Audiencia tales nombramientos y refirió los prejuicios causados a los indios, por lo que solicitó con vehemencia que se cumpliera la ley. La Audiencia liberó orden ejecutiva al gobernador Ordóñez para que destituyera a todos los corregidores, con multa de mil ducados de no cumplir la orden, además de exigir que se le informara en un término de 90 días. Otra provisión enviada al gobernador, a su teniente y demás empleados reales, fue la de no cobrar derechos a los indios en los despachos de sus negocios particulares, además del señalamiento de que se harían acreedores a una multa de 500 pesos en caso de no cumplir. Pablo Higueras de la Cerda fue designado por Ordóñez como su teniente el 10 de diciembre de 1594 y a principios de 1595 le encomendó a Ambrosio Argüelles la exploración del litoral de la bahía de la Ascensión, donde se habían refugiado muchos indios insumisos. En el proyecto estaba que la expedición llegara a la región sureste de la Península, hasta los límites de Honduras. Se facultó a Argüelles para levantar infantería y caballería y hacer el viaje por mar o por tierra. Se le proveyó de recursos y se le ordenó que informara de sus actos, reservándose para el gobernador la resolución de los puntos graves relativos al gobierno de los indios que fueran pacificados. La muerte inesperada del gobernador, el 26 de mayo de 1595, suspendió la campaña. El Ayuntamiento reconoció a su teniente como gobernador interino con el título de alcalde y justicia mayor, de acuerdo con lo establecido por la ley expedida en Valladolid, España, el 15 de febrero de 1557.