Figueroa y Bravo, Antonio de  Gobernador de Yucatán (1610-1617). Originario de Extremadura, España. Fue nombrado gobernador de Yucatán el 7 de agosto de 1610, pero tomó posesión de su gobierno hasta el 29 de marzo de 1612. Llegó a Mérida acompañado de su esposa e hijos y de su hermano Francisco, quien traía nombramiento de tesorero y factor de la Real Hacienda en Yucatán. Introdujo el cultivo de la grana, a través de dos indígenas tlaxcaltecas conocedores del mismo. El gobernador Figueroa le confió a Francisco de Espinosa la tarea de recorrer las distintas poblaciones para que se les enseñara a los naturales de la región el cultivo de la planta, que se cosechó con gran éxito y proporcionó importantes beneficios económicos a Yucatán y al Real Erario. Nombró como teniente y asesor a Gaspar León de Salazar, muy respetado por su rectitud y conocimientos, quien lo orientó con acierto en los aspectos de justicia, ya que ninguna de las sentencias dadas en su mandato fue revocada por el Tribunal Superior de México. Amplió el Palacio de Gobierno, apoyó a los vecinos en la construcción de sus casas de mampostería y edificó la suya. En los pueblos de la sierra mandó construir las casas reales para las sesiones del ayuntamiento indígena, las oficinas de administración y para hospedaje de los viajeros. Durante su gestión emprendió acciones para reducir a los indígenas de los bosques de Sahcabchén y tuvo problemas con los encomenderos de Valladolid, que en mayo de 1613 lo tomaron prisionero en Río Lagartos, lo embarcaron a Veracruz y lo consignaron al virrey Diego Fernández de Córdoba con acusación firmada por los opositores. El virrey restituyó en sus funciones a Figueroa y mandó procesar a los encomenderos. El gobernador no sólo intercedió por ellos y consiguió que se les perdonara para que regresaran a sus casas, sino que les concedió favores. Esta actitud acabó con la oposición de los encomenderos. Gobernó con paz y tranquilidad hasta el 27 de septiembre de 1617. Después de su administración en Yucatán, fue corregidor de Cuzco y de la villa imperial del Potosí en el Perú. Allí murió antes de 1626. Su viuda e hijos regresaron a establecerse en Yucatán.

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