Lagarto

Lagarto  Crocodilus acutus. Saurio perteneciente a la familia teídos. Popularmente se le llama lagarto o cocodrilo americano; en maya su nombre es ayin. Son animales torpes en la tierra, pues sus patas son cortas y débiles, pero ágiles en al agua, donde nadan impulsándose con la cola, grande y fuerte. Su tamaño total varía de 1.50 a 2 m, aunque puede haber ejemplares mayores. La cabeza es aplanada y tiene grandes mandíbulas con dientes; los oídos protegidos por placas; el escudo de la cabeza está separado de los huesos del cráneo, lo que los distingue de los cocodrilos del viejo mundo. El cuerpo está cubierto por una gran variedad de escamas en sorprendentes combinaciones. Ponen huevos, algo mayores que los de gallina. Prefieren las aguas salinas, como la de los esteros de la costa norte de Yucatán, desde Celestún a Río Lagartos. Es carnívoro y se alimenta de pececillos y crustáceos; por lo general no ataca a los animales mayores, pero puede ser peligroso si está hambriento. En la cosmogonía maya tiene una importante función, pues flota sobre el mar universal y en su dorso sostiene a la Tierra; se le representa algunas veces en los Códices, sobre todo en el de Dresde, en escenas mitológicas. Cuando los mexicas adoptaron el calendario maya, el primer día de la secuencia de un mes, que era imix o maíz, lo cambiaron por “cipactli”, lagarto. La piel de este animal es muy apreciada en peletería para la confección de cinturones, zapatos, carteras, bolsos, y otros artículos, y los animales enteros tratados por los taxidermistas constituyen llamativos adornos; por esos motivos se le cazó intensamente. Actualmente es protegido ya que constituye una especie en vías de extinción.