Garcés, Julián (1452?-1542) Fraile dominico y primer obispo de la Nueva España. Nació en Munébrega del reino de Aragón, en España, y murió en Puebla. Según Francisco Lorenzana y José M. Beristain, Julián Garcés tomó el hábito de la Orden de Predicadores en Calatayud, aunque Crescencio Carrillo y Ancona considera que lo más probable es que haya sido en Salamanca. Respecto de su fecha de nacimiento también hay dudas, ya que en diversas biografías oscila entre 1450 y 1460. Estudió en la Universidad de París; enseñó muchos años en los conventos de su Orden; fue confesor del arzobispo de Burgos, Juan R. de Fonseca, y predicador ordinario y capellán del emperador Carlos V, quien pidió al Papa León X nombrara a Garcés obispo en el nuevo continente. El prelado accedió a la petición y a través de la bula Sacri Apostolatus Ministerio, del 24 de enero de 1519, fundó el obispado de Nuestra Señora de los Remedios y Carolense, en honor del monarca, el primero de Tlaxcala-Puebla. Sin embargo, Carrillo y Ancona sostiene que Garcés fue el primer pontífice de Yucatán y de Puebla de los Ángeles, aun cuando en la segunda se haya erigido la primera catedral, porque Yucatán no perdió su derecho a tener la propia en su territorio. Asimismo, afirma que el obispado de Yucatán no pudo erigirse debido a que no se culminó en ese tiempo la conquista de Yucatán, pero ya contaba con el decreto del rey de España y del Papa de la Santa Sede. Para el historiador, el obispado de Tlaxcala fue una ampliación y extensión del primero. Estas aseveraciones han sido cuestionadas por diversos estudiosos del tema, entre ellos el arzobispo Sergio Méndez Arceo.
Carrillo y Ancona señala que en aquellos tiempos no existía estabilidad para los descubridores y conquistadores. Córdova, en 1517, y Grijalva, en 1518, habían huido ante los ataques de los indios mayas y Cortés que trajo fuerzas mayores, en 1519, pasó de largo para ir a someter a Tlaxcala y México. Así pues, al abandonarse momentáneamente la conquista de Yucatán para ocuparse de la de México, no pudo llevarse a cabo la erección del Obispado de Yucatán; pero obtenida una nueva concesión apostólica, se extendió dicha diócesis a Tlaxcala, donde se estableció, en 1527, Julián Garcés. Llegó a su diócesis acompañado de fray Diego Loaisa, de la misma Orden de Santo Domingo y del clérigo Gil González Romero, a la avanzada edad de 75 años.
El primitivo obispado de Yucatán no se perdió con el establecimiento del prelado en Tlaxcala, sino que se amplió y extendió hasta allá. Como la población de Tlaxcala era pobre, la catedral fue erigida en Puebla, sin que Yucatán, por ningún título, hubiese perdido el derecho de tener la propia en su suelo. Carrillo y Ancona dice que «Si Yucatán tiene sobre Puebla y sobre toda la Iglesia mexicana, la primacía histórica de su creación, nunca anulada, ni perdida, Puebla alcanzó sobre Yucatán la primacía de la ejecución y de la institución de su Catedral, aunque por la misma bula de la de Yucatán».
Julián Garcés procuró la fundación de la ciudad de Puebla, la cual fue llamada Angelópolis o Puebla de los Ángeles y erigió la iglesia Catedral bajo el título de la Inmaculada Concepción. A espaldas de ésta mandó construir el palacio episcopal al cual se trasladó en 1539. Fundó seis capellanías y un aniversario. Asimismo, dos hospitales, uno en Puebla que puso bajo el patronato del Papa, y otro en el Perote, a beneficio de los peregrinos enfermos que venían de España. Se interesó por los indios, en cuyo favor obtuvo de Paulo III la bula Sublimis Deus, que declaró la racionalidad de los indios contra los que les negaban sus derechos humanos. Esta bula fue concedida gracias a la famosa epístola que en 1537 dirigió Garcés al Papa, abogando por los naturales y que fue traducida del latín al castellano por fray Agustín Dávila y Padilla. Intervino como mediador en las discusiones que se suscitaron entre los primeros oidores de México y el conquistador Hernán Cortés. En el mes de diciembre de 1542, Julián Garcés enfermó de fiebres intermitentes, que le ocasionaron la muerte. Sus restos fueron sepultados en la Catedral de Puebla.