Higiene (La) (1918) «Órgano de la Dirección General de Salubridad e Higiene». Se editó mensualmente en Mérida a partir de mayo de 1918. Su director fue Gil Rojas Aguilar, y Edmundo G. Cantón, el jefe de redacción. Figuraron como colaboradores Eduardo Urzaiz Rodríguez, Pedro F. Rivas, Francisco Colomé, Conrado Menéndez Mena, Avelino Ruiz Sansores, Pastor Rejón R., Álvaro Ávila Escalante, Romualdo Manjarrez L, Germán Pompeyo S., Ariosto Castellanos C., Vicente Rodríguez Arjona y F. Buenfil González. Reprodujo los discursos pronunciados el 21 de abril de 1918 en la apertura del Laboratorio Bromatológico del estado por Hircano Ayuso O’Horibe y por Enrique Escalante, jefes del Laboratorio Antirrábico y del inaugurado, respectivamente. Refirió los trabajos iniciales de la Dirección General de Salubridad e Higiene de Yucatán, fundada en mayo de 1917, que sustituyó a la Junta Superior de Sanidad, para mejorar la salud pública en la entidad. Publicó regularmente informes de estadística demográfica y sanitaria basados en el censo de 1910. Difundió el reglamento interior de la Dirección General de Salubridad e Higiene, según el decreto 702 expedido por Salvador Alvarado. Notificó las disposiciones legales emitidas para regular las actividades de los expendedores de alimentos. Informó sobre las inspecciones practicadas a diversos establecimientos comerciales y de servicios como cafés, dulcerías, tiendas de abarrotes, expendios de carne, salones de cerveza, hoteles escuelas, casas de vecindad, establos, lavanderías, peluquerías y otros. Comentó el proyecto de abastecimiento de agua potable para Mérida, que habría de enviarse al ejecutivo del estado para su estudio y aprobación. Informó de las acciones emprendidas por la administración pública para establecer un control sobre la prostitución en la entidad. Reprodujo un informe de la investigación de las autoridades sanitarias a propósito de un tratamiento aplicado por el cubano Ángel García a varios enfermos de lepra que, según lo observado, mejoraron su salud, a pesar de que el mencionado carecía de título legal. Publicó estudios referentes a la incidencia de otras enfermedades en el estado, como la sífilis y la tuberculosis. Insertó diversos artículos de divulgación sobre temas de salud, higiene y prácticas alimenticias. Se distribuyó gratuitamente entre las instituciones del ramo. Se editó en la Imprenta Constitucionalista.