Escudo de Juan de Aguilar  Entre las piedras labradas de la heráldica funeraria colonial, destaca la hermosa lápida de Juan de Aguilar, compañero de Francisco de Montejo en la conquista de Yucatán. Constituye la única piedra funeraria blasonada de aquel período que se conserva en el sitio original donde fue hallada: el piso del patio lateral norte de la Iglesia de Las Monjas en esta ciudad. De otras piedras labradas que conserva el Instituto Nacional de Antropología e Historia, se ignora su exacta procedencia y ubicación. La plancha rectangular mide 1.80 m de largo por 0.90 m de ancho y ostenta el escudo heráldico de Juan de Aguilar, en cuyo campo central luce cinco franjas (listones horizontales) y una gran águila, cuya cabeza, alas extendidas y cola asoman tras el blasón. Una inscripción mortuoria esculpida en antigua ortografía castellana, dice: «Sepultura de Juan de Aguilar y de sus herederos. Fue natural de la ciudad de Ecija y uno de los primeros conquistadores de estas provincias». El águila es un elemento heráldico «parlante», típico del linaje de los Aguilares. La piedra sepulcral carece de fecha, pero sin duda pertenece al siglo XVI, en cuyos últimos años debió morir este personaje. Fue casado con Leonor de Aguilar, hija de Hernando de Aguilar, otro de los fundadores de Mérida.

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