Zapote  Término españolizado del nombre náhuatl sapotl, el cual designaba a varios frutos y que sigue empleándose popularmente, incluso en Yucatán, sólo que restringido a tres distintas plantas. Con el nombre zapote se conocen el árbol y el fruto de Manilbara acras y Achas zapota, familia: sapotáceas; en maya: yá, chak-yá. Árbol grande, con 25 m de alto, con densa copa; hojas en racimo al final de las ramas, pecioladas, oblongas o elípticas; flores pequeñas, blancas, solitarias en las axilas de las hojas; fruto ovoide o globoso, de 6 cm o más de diámetro, con dos a cinco semillas negras. La madera es dura, rojiza, fácil de trabajar y pulir y poco atacada por los insectos; los mayas la emplearon mucho en sus construcciones, sobre todo para vigas y dinteles, que aún permanecen en los edificios prehispánicas y coloniales. La carne del fruto es de color pardo-amarillento, de sabor dulce, por lo que es muy apreciado.

El más importante producto del árbol es la gomorresina que se obtiene de las cortaduras hechas al tronco, denominada tsikte en maya, palabra que adoptaron los aztecas para llamar chictsapotl al árbol, de donde provino el nombre españolizado de chicozapote, popular en el resto de la Nación, y de chicle a la goma de mascar. (Véase: Chicle).

Zapote bobo o reventón, especie: Pachina aquatica; familia bombéceas. En maya, kuy-che. Árbol de 8 a 15 m de alto; hojas digitadas con seis u ocho hojuelas oblongas o elípticas; flores de 20 cm de largo, blancas o amarillentas, con estambres purpúreos numerosos y largos formando un tubo; fruto subgloboso de 20-30 cm de diámetro, carne sólida con varias semillas de 2 cm, comestibles. El árbol generalmente crece en las ciénagas, pero es escaso.

Zapote negro, especie: Diospyrus ebenaster; familia ebenáceas. En maya, tauch. Árbol de 12 m de alto; hojas alternas, oblongas o elípticas, coriáceas y brillantes, de 10 cm de largo; flores axilares, pequeñas, en grupos de siete, con la corola urceolada amarilla-verdosa; fruto globoso de 10 cm, con el cáliz persistente, la cáscara verde y delgada y la pulpa negra, dulzona con varias semillas. La pulpa puede comerse sola o rociarla con azúcar o con vino, lo que mejora su sabor. También se consume en forma de refresco. En el resto de la República, su nombre popular es zapote prieto.