Pushball Es un deporte de creación reciente que, originalmente, era una especie de polo, ya que se jugaba con caballos, pero en vez de bola, los jinetes impulsaban un balón.
Este deporte empezó a practicarse principalmente en los centros hípicos militares, hasta que se convirtió en un deporte sin caballos. Siendo la pelota muy grande, este juego adoptó también el nombre de Balón Gigante. La pelota es empujada, ahora por personas, hasta llevarla a la meta o portería y anotar puntos para que, acumulados, den el triunfo al equipo que anote mayor cantidad.
Originalmente, jugado con caballos, competían dos equipos formados por cuatro jugadores, tres atacantes y un guardameta en un terreno rectangular de 90 metros de longitud por 40 de ancho. Los postes que constituían la meta guardaban una separación de 7 a 8 metros.
El pushball sin caballos no es un deporte apto para la niñez; lo practica la juventud, debido al tamaño del balón que es de aproximadamente dos metros de diámetro. Para las escuelas secundarias y otras con alumnos jóvenes, este deporte ofrece la ventaja de que en él participa un buen número de jugadores y nadie se queda sin la oportunidad de hacer ejercicio. El campo es un poco más extenso que el original, como uno de fútbol (90 x 45 m). Las porterías, parecidas a las del fútbol americano, consisten en unos bastidores en forma de H cuya altura abajo del travesaño horizontal es suficiente para permitir fácilmente el paso del balón. Los jugadores, que pueden ser 40, 50 o hasta 60 por equipo, se distribuyen convenientemente por todo el campo, en cuyo centro se coloca el balón. Algunos se quedan cerca de la portería para entrar en acción cuando la bola se acerca a ella, otros permanecen como a 10 metros de distancia del balón. Al silbatazo del árbitro se inicia el juego y los jugadores que quedaron cerca del balón se lanzan hacia él para controlarlo y acercarlo a la portería que le corresponde, con intención de pasarlo por debajo del travesaño horizontal de la H o por encima del mismo. Cuando un equipo pasa la bola por debajo, se le conceden 3 puntos y, si la pasa por arriba, 6, ya que es más difícil levantarla entre muchos y lograr que pase por arriba.
El inicio del juego es bastante rudo, pues al oírse el silbatazo, los jugadores se arrojan sobre el balón con ímpetu, produciéndose violentas fuerzas encontradas. Durante el juego, la habilidad se impone, ya que al llevar el balón al área de portería, hay que enfrentar a un gran número de oponentes. Los esfuerzos se multiplican al tratar de pasar el balón por la portería para obtener 3 o 6 puntos.
En Yucatán. El Ing. Humberto Canto Echeverría, gobernador de Yucatán en 1940, introdujo el pushball a nuestro estado al traer de los Estados Unidos un balón para practicar este deporte. Su principal promotor fue el Profr. Augusto Salias Ahuja, quien también era árbitro de los encuentros que se verificaron.
Pueden mencionarse tres equipos de pushball en Yucatán: el 42 Batallón de Infantería, la Escuela Preparatoria de la Universidad de Yucatán y la Escuela Secundaria Adolfo Cisneros Cámara, quienes brindaron a los aficionados reñidos encuentros en el Campo Deportivo Salvador Alvarado, considerado como sede de este deporte. Los mismos equipos dieron encuentros de exhibición en el Campo Deportivo 20 de Noviembre de la ciudad de Campeche y en el Parque Deportivo Hidalgo, del puerto de Progreso. Para conservar el único balón que existía en el estado, los equipos practicaban con un balón de lona relleno de pasto seco que cumplía con las dimensiones reglamentarias. Este balón de prácticas fue producto del ingenio de Rafael García Comas, entonces administrador del Campo Deportivo Salvador Alvarado. El balón de pushball era muy costoso y tenía que importarse, lo que hizo que se extinguiera su práctica en Yucatán.